1. Milagro en el Bosque Encantado. Para adentrarse de lleno en el misterio del Pino es preciso viajar hacia atrás en el tiempo y perderse entre la laurisilva hasta encontrarnos frente a frente con un gigantesco y robusto ejemplar de pino canario de más de cuarenta metros de alto y escoltado por tres dragos. Así es el imponente y enigmático escenario que da origen a la devoción de la Virgen del Pino.

Un día, el 8 de septiembre de 1481, la Virgen se apareció en lo alto de un árbol de cuya base nacía también una manantial de aguas que las gentes del momento creían medicinales. Aquel “resplandor maravilloso”, según recogen los escritos de Fernando Hernández en su Novena a Nuestra Señora (1782), sigue brillando más de cinco siglos después en la fe que profesan los grancanarios por su Patrona. Por eso, #sentirelPino es también rastrear las raíces de la Historia. Y esas raíces no son otras que las de un árbol legendario.

2. Cayó el árbol, pero la fe permaneció en pie. Aquel umbrío sitio donde tuvo lugar el milagro era conocido como Aterura, aunque en algunos textos de la época se trascribió como Terore o Terori, origen de la moderna denominación de la Villa de Teror. La noticia de la Aparición corrió tan rápido como la pólvora, extendiéndose su eco hasta el último barranco y farallón de costa.

Cada día que pasaba crecía el número de personas que se acercaban en peregrinación hasta el Pino. Se llevaban consigo ramas, trozos de corteza y piñas, ya que les atribuían propiedades milagrosas. No obstante, el tiempo fue socavando el árbol hasta que un vendaval provocó el derribo del Pino de Las Maravillas en abril 1864. Pero la historia no concluyó aquí. Al contrario. El viento había arrancado del suelo las raíces del árbol, pero no pudo tumbar la fe de Gran Canaria en la Virgen del Pino.

3. El espíritu del árbol.  Año tras año, el fervor por la Virgen dejó pequeño todo lo demás, incluida la originaria ermita levantada en el lugar donde una vez se alzó el impresionante Pino de Las Maravillas. Pero, ¿realmente no quedó nada de él? No exactamente…

En la actualidad, uno de los secretos más preciados de la Basílica del Pino se encuentra en el camarín de Nuestra Señora, donde permanece una cruz de madera realizada según la tradición con parte del tronco del Pino de Las Maravillas. Contemplar la llamada Cruz Verde es asomarse al balcón del pasado y tocar una de esas fibras que nos llevan a #sentirelPino desde las profundidades de la historia y el sentimiento de todo un pueblo.

4. El misterio de los pies. Otro misterio flota alrededor de la aparición de la Virgen del Pino. La tradición recoge que en la copa del pino donde se hizo presente la Señora había una peana sobre la cual quedaron plasmados sus pies. Pero jamás se supo de ella tras la caída del Pino de las Maravilla. Una vez más queda patente que #sentirelPino es sentir el halo del misterio.

5. Estrella del Mar. La fe en la Virgen del Pino ha brotado con fuerza en tierra Gran Canaria. Pero también ha surcado los mares. De hecho, y éste es un aspecto relativamente poco conocido, también cuenta con el título de Stella maris, es decir, de Estrella del Mar y protectora de los marineros.

El joven historiador Gustavo Alejo Trujillo Yánez, natural de Gran Canaria, ha recopilado varios episodios que ilustran este hecho. En sus escritos relata por ejemplo la asombrosa historia de Lorenzo García, que aseguró haberse librado de una tormenta en alta mar arrojando al océano una piña que había recogido del pino donde se señalaba la aparición de la Patrona de la Diócesis de Canarias. Estos marinos llevaron por los siete mares la idea de lo que supone #sentirelPino.

6. Teror, la villa celestial. Evidentemente, el pasado, el presente y el futuro de la Villa Mariana de Teror están ligados a la Virgen del Pino. De hecho, la historia religiosa sigue claramente escrita en sus calles y ha conformado uno de los patrimonios arquitectónicos más importantes del archipiélago canario, con especial importancia en el terreno de la arquitectura religiosa. La Basílica del Pino es sin duda la más importante aunque no única representación de esta realidad.

La Alameda, cuyo origen se remonta a la explanada situada ante el Palacio Episcopal y el Monasterio del Císter contribuyen a consolidar el aire celestial de Teror, villa situada a seiscientos metros de altura pero más cerca de las alturas de lo que pudiera pensarse en un primer momento. Si quieres #sentirelPino, ven a Teror.

7. De parroquia a Basílica de Nuestra Señora del Pino. La actual Basílica de Nuestra Señora del Pino tiene su origen en la parroquia primigenia fechada a principios del siglo XV. El actual templo comenzó a construirse en el último tercio del siglo XVIII. Uno de sus aspectos más llamativos es la utilización de piedra amarilla procedente de la cantera de Ayagaures, en el sur de Gran Canaria.

8. La organización del fervor en los años cincuenta. La fe y la devoción populares jamás han necesitado estímulos. No obstante, el formato de la actual y multitudinaria romería-ofrenda que se celebra cada 7 de septiembre en Teror, el día antes de la festividad del Pino, arrancó en 1952. La idea se debe al folclorista Néstor Álamo y al Cabildo de Gran Canaria a raíz del patronazgo a favor de la Virgen como Patrona de la Diócesis de Canarias.

9. Camino al interior. Desde hace siglos, la visita al santuario de la Virgen del Pino en Teror los días previos a su festividad el 8 de septiembre, es una de las tradiciones más arraigadas en el pueblo canario. Peregrinos de todas las edades y condiciones acuden a los pies de la Patrona de la Diócesis de Canarias a ‘cumplir su promesa a la Virgen’. Es un acto de fe y devoción, pero también un camino, en solitario o en compañía, al interior de uno mismo.

10. Prepárate para #sentirelPino. Las fiestas del Pino son lo que son actualmente gracias al profundo sentimiento que la Patrona Insular provoca entre la población. Tú también puedes participar de este sentimiento y de los festejos. Teror te está esperando para disfrutar de la mayor celebración de Gran Canaria. Todos los caminos conducen a la Villa durante estos días. Toma el tuyo y prepárate para #sentirelPino. 

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