Estos genes parisinos se conjuntaron a la perfección con el carácter cosmopolita, bullicioso y abierto de Las Palmas de Gran Canaria para alumbrar un espacio que, más de un siglo después, sigue siendo un corazón con salud de hierro y que late a través de cuarenta establecimientos que permiten comprar una flor, degustar un pulpo a la plancha, un tataki de atún o pinchos de texturas, colores y combinaciones casi imposibles y, de salida, regresar a casa con un kilo de mandarinas, con esa especie que llevabas meses buscando y no encontrabas en ningún sitio o con un pescado de los que brillan con destellos de plata bajo la cúpula octogonal que corona esta estructura de 1.700 metros cuadrados.

El Mercado del Puerto invita a un viaje por los sabores del mundo sin salir de los límites de un recinto remodelado en 1994 y que se cuenta entre las escasas muestras de arquitectura industrial cerrada y fabricada en hierro de la capital grancanaria. Este recorrido gastronómico incluye paradas en Italia, en los Países Nórdicos, en Grecia, Brasil, Galicia, la Ribera del Ebro o Estados Unidos y, por supuesto, en el recetario canario. Aquí, el jamón ibérico es vecino del salmón ahumado y del enebro y los pulpos y las papas arrugadas casi se dan la mano con los tacos mexicanos.

El Mercado del Puerto es la ONU del sabor en un lugar enclavado en pleno istmo, equidistante del área portuaria y de la playa de Las Canteras y también del popular barrio de La Isleta, indisolublemente unido a la historia y el desarrollo marítimo de la ciudad. Por lo tanto, el Mercado el Puerto es a su vez el mejor dique de partida o de llegada en cualquier incursión por este cuadrante de la ciudad repleto de ofertas comerciales, de restauración y, por supuesto, de posibilidades de alojamiento.

Esta celebración diaria de la vida y del disfrute de los pequeños placeres se completa con una docena de puestos de abasto que incluyen carnicerías, fruterías, floristerías o marisquerías, entre otros establecimientos a los que se suman igualmente locales donde se sirven cafés de granos recién molidos o donde se arregla lo mismo un bolso que la cremallera de esa vieja chaqueta de cuero que nos resistimos a jubilar, al mismo tiempo que zapaterías, licorerías, expositores de productos llegados de la mismísima Rusia, tiendas de nutrición deportiva, peluquerías o perfumerías.

Los indiscutibles encantos del Mercado del Puerto de Las Palmas de Gran Canaria le han hecho merecedor de ser incluido en diversas listas junto a los mejores y más atractivos espacios de su categoría en España, caso del Mercado de San Miguel, el Mercado de Antón Martín y el Mercado de San Fernando de Madrid, el Mercado de Abastos de Santiago de Compostela, el Mercado de la Ribera de Bilbao, el Mercat Central de Valencia, el Mercado Victoria cordobés o la mítica Boquería barcelonesa. Pero, en realidad, su verdadera intención es que tú lo incluyas en la lista de lugares imprescindibles para visitar en Gran Canaria.