Sí. Es verdad. Cualquier jugador europeo tiene un buen número de lugares a los que viajar para practicar golf. Claro. Y por supuesto que hay un buen número de islas donde se puede jugar al golf. En cualquier agencia puede elegir alguna oferta para viajar sin tener que separarse de su bolsa de palos.
Pero no todos los destinos de golf son iguales. No lo son.
Porque, ¿cuántos de esos destinos son islas europeas? ¿Y cuántos, como Gran Canaria, un destino tradicional entre varias generaciones de europeos? ¿Y cuántos cuentan con más de 120 playas? ¿Tienen acaso esos otros lugares de vacaciones la oferta hotelera de Gran Canaria?
Probablemente no.
Es también poco probable que encuentre muchas islas que oferten 8 campos de golf concentrados en un radio tan pequeño. Aquí en Gran Canaria puede jugar en 8 campos completamente diferentes. Todos cercanos. Pero diferentes. Puede practicar junto a un paisaje de dunas, en pleno centro turístico de la isla. O puede ver como su pareja de juego envía la bola directa al mar, mientras usted emboca desde el bunker.
Puede disfrutar de su deporte junto a una caldera volcánica o en medio de un paisaje propio de un desierto lunar. Y hacerlo en mangas de camisa. No hace falta que traiga abrigo.
Porque, lo más importante de todo, en Gran Canaria encontrará un gran destino de golf abierto los doce meses. Disfrute del clima suave de la isla en cualquier época del año. Un clima hecho por encargo para que ni una sóla bolsa de palos coja polvo. Una isla que parece hecha adrede para las vacaciones de los aficionados al golf.
