¿Es usted corredor de bolsa? Entonces quizás no le conviene venir de vacaciones a Amadores, en el sur de Gran Canaria. Puede caer víctima de la tranquilidad duradera. La tranquilidad que le asalta al veraneante que decide tomar vacaciones en la playa de Amadores. Los expertos lo conocen como el "síndrome del gran gran descanso".
Hay corredores de bolsa que después de tomar vacaciones aquí no han vuelto a cerrar un sólo trato. Dejaba de preocuparles el cierre en Tokio. Quedaban marcados por los efectos del gran gran descanso que les asalta a muchos de los veraneantes en playa de Amadores.
¿Es usted corredor de 110 metros vallas? Entonces quizás debería evitar venir de vacaciones a Amadores. Caerá preso del síndrome de no me metan prisa. Sólo querrá gastar los días al sol, nadando en el mar tranquilo que toca la costa junto a la playa de Amadores.
Hay corredores de 110 metros vallas que nunca han vuelto a conseguir ni una sóla marca potable. Cambiaron de mentalidad tras estar aquí. Decidieron saltar las vallas despacio, sin prisas. Al volver a casa sólo pensaban en nadar, tan tranquilamente, en tomar el sol o ir a bucear. En almorzar, cenar y merendar junto al mar, sin preocuparse tanto de las cosas, sin tomarse prisas. Al modo de unas vacaciones en Amadores.
Por eso, piénselo dos veces. Porque el mundo va muy rápido fuera de aquí fuera de la playa tranquila.
