Situado en las medianías del norte de la isla de Gran Canaria, a unos 20 km de distancia de la capital, se encuentra el municipio de Teror, uno de los núcleos habitados más antiguos de la isla.
Lugar de peregrinación por excelencia desde hace más de cinco siglos, la villa de Teror es todo un símbolo para los isleños, ya que el municipio acoge en su Basílica a la Virgen del Pino, Patrona de la Diócesis de Canarias y referente religioso de generaciones de canarios.
Considerado como uno de los pueblos más bonitos de la isla, visitar su casco histórico de calles adoquinadas y tradicionales balcones, la plaza de Nuestra Señora del Pino o su Basílica, declarada monumento histórico-artístico de carácter nacional y Bien de Interés Cultural, es una visita obligatoria si viajas a Gran Canaria.
Fundado a partir de la aparición de la Virgen del Pino en el año 1481, Teror es un pueblo cuyo orígen fue constituído mucho antes de la conquista de la isla. Declarada villa mariana a finales del siglo XVI, su casco histórico alberga uno de los patrimonios religiosos, arquitectónicos y culturales más importantes de Gran Canaria.
Una entidad religiosa y social que ha quedado impregnada en sus preciosas calles, plazas y monumentos. En abril de 1979, el entorno de la Basílica fue declarado Conjunto Histórico - Artístico.
La plaza de Teror es el centro neurálgico de la villa, testigo de los más importantes acontecimientos del municipio. Desde ella se pueden observar los balcones típicos de la arquitectura canaria que adornan las viviendas del entorno. Una plaza amplia que da entrada a la Basílica y espacio principal del casco histórico, que recomendamos recorrer a pie para apreciar todo su encanto.
La Calle Real es la avenida principal que recorre el trayecto desde la entrada de la villa hasta la plaza de Nuestra Señora del Pino, donde se encuentra la Basílica. Una calle adoquinada donde destacan las viviendas cuyo elemento común son sus característicos balcones canarios.
Calle comercial por tradición, en ella se mantienen algunos de los establecimientos más antiguos del municipio.
Junto con la Calle Real, la Alameda constituye otro de los lugares más transitados de la villa. Su origen se remonta a una explanada situada delante del Palacio Episcopal, cuyo aspecto actual se configuró en el año 1981, junto a la rehabilitación del palacio.
Principal punto de encuentro y espacio de recreo al aire libre, actualmente tienen lugar en esta plaza diferentes celebraciones de índole cultural, siendo uno de los rincones más frecuentados por los visitantes durante su recorrido por el casco histórico.
Visitar Teror es visitar su Basílica. Se halla situada en la plaza de Nuestra Señora del Pino y comenzó a construirse en 1767, aunque posteriormente fue restaurada en varias ocasiones, entre los años 1968 y 1969.
Su fachada se compone de tres puertas y dos entradas laterales que permiten el acceso a los visitantes, especialmente durante la víspera de la festividad en honor a Nuestra Señora del Pino, patrona de la isla y cuya imagen se alberga en el interior de la Basílica.
La imágen de la Virgen del Pino es la pieza más valiosa de la Basílica de Teror, no solo por su significado, sino por su antigüedad (señala la tradición que su descubrimiento tuvo lugar el 8 de septiembre de 1481).
En la parte trasera del Altar Mayor se sitúa el Camarín, donde se encuentran diferentes ofrendas en forma de vestidos y joyas donadas por los feligreses, señal del fervor popular hacia la Virgen y ejemplo del arte del bordado y la orfebrería artesanales.
En el exterior de la Basílica se puede observar la Torre del Campanario, conocida popularmente como “La Torre Amarilla”. Inaugurada en el año 1708, se trata de uno de los pocos elementos arquitectónicos que se conservan del anterior templo, que precedió al edificio actual.
Cercana a la Basílica se encuentra la plaza Teresa de Bolívar, levantada en 1953 en memoria de la esposa del libertador americano y cuyo bisabuelo, Bernardo Rodríguez del Toro (Marqués del Toro) nació en el pueblo de Teror. Una plaza obra del artista canario Néstor Álamo que imita la arquitectura colonial y en la que se encuentra el busto de Simón Bolívar.
Ligado al nombre de Teror se encuentra también el Monasterio del Císter. Su origen se remonta al año 1882, cuando se iniciaron sus obras de construcción, celebrándose en 1980 el primer centenario del establecimiento de las monjas de clausura en el convento, cuyas vidas están estrechamente vinculadas a los habitantes del pueblo.
En el Convento del Císter se pueden adquirir dulces típicos canarios como mantecados, truchas, mazapanes o roscos de anís.
Y es que Teror es un municipio muy ligado a la religión. En el casco histórico se puede visitar la Cruz de los Caídos, el Palacio Episcopal, el Convento de las Dominicas (al pie del Pico de Osorio) o la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús (en los Abejales).
Situada detrás de la Basílica del Pino, en un lateral de la plaza de la Alameda, se encuentra el Ayuntamiento de Teror. Un inmueble adquirido en el año 1909 con la finalidad de establecer en él las escuelas públicas, aunque finalmente se destinó a Casas Consistoriales.
Hasta finales de los años 80 del siglo XX, todos los servicios municipales estuvieron emplazados en este edificio, pero a partir de los años 90 y debido al crecimiento de las funciones del Ayuntamiento, se hizo necesaria la ubicación de varias oficinas fuera del inmueble. Actualmente se encuentran ubicadas aquí las oficinas del área de igualdad y se desarrollan sesiones plenarias.
La Fuente Agria es uno de los lugares más emblemáticos de Teror. Situada en el Barranco, a menos de un kilómetro de su casco histórico, el agua del manantial ha abastecido al pueblo durante siglos, siendo una de las principales fuentes de riqueza natural del municipio.
Desde 1982, el agua de Teror se puede adquirir embotellada, encargándose la empresa municipal de su comercialización; aunque todavía son muchos los vecinos que se acercan hasta la fuente con sus garrafas y botellas.
El municipio de Teror dispone de varios senderos y espacios protegidos en un entorno natural privilegiado, ideales para los amantes del senderismo y la naturaleza. Pino Santo, lugar de gran belleza paisajística y valor ecológico; el Parque Natural de Doramas, donde se sitúan los barrancos de Azuaje y Moya; la Finca de Osorio, que alberga el Aula de la Naturaleza y donde se ofrecen visitas guiadas o la Caldera de Pino Santo, con una extensión de medio kilómetro de diámetro.
Pero también cualquier momento del año es idóneo para recorrer los variados caminos que parten de cada uno de los municipios de la isla para desembocar en Teror. ‘Vamos Pal Pino’ es la aplicación móvil para los amantes del senderismo y también para los devotos de la patrona de Gran Canaria. Esta app ofrece la información necesaria para realizar los caminos de peregrinación tradicionales y vivir una experiencia enriquecedora hacia la singular villa de mariana de Teror.
Cada domingo desde las 9:00h hasta las 15:00h, la Basílica de Teror y sus alrededores se convierten en el punto de encuentro de cientos de locales y turistas que visitan su popular Mercadillo. Con más de 200 años de historia, se trata de uno de los mercados ambulantes más antiguos de Gran Canaria.
Ropa, artesanía canaria, productos frescos de la tierra, repostería típica y una excelente gastronomía avalan este mercadillo, que se encuentra entre los más populares de la isla.
Horario: Todos los domingos de 9:00h a 15:00h.
Dirección: Entorno de la Basílica del Pino y plaza de Sintes, 35330. Teror.
Teror es uno de esos municipios en los que la comida tradicional canaria adquiere una especial relevancia. Muy ligada a la repostería, la villa de Teror posee una amplia tradición de pastelería típica de Gran Canaria. En el Convento del Císter o en la famosa Dulcería Benítez, se pueden encontrar truchas, mazapanes, mantecados, milhojas o bizcochos, dulces hechos a mano que deleitarán a grandes y pequeños.
Aunque sin duda, el producto estrella de Teror son sus chorizos y morcillas dulces, una especialidad gastronómica única en el mundo que enamora a grancanarios, isleños y turistas. Estos chorizos y morcillas de producción artesanal se caracterizan por su combinación de sabores (suave, dulce y picante), cuya mezcla de especias lo hacen muy agradable al paladar, convirtiéndolo en un producto muy consumido en las islas. Así que si vienes a Teror, no puedes dejar de probar sus famosos chorizos.
Descargar folleto / Mapa de Gran Canaria / Audioguía
Fiestas del Pino: la Fiesta del Pino es la mayor fiesta de Gran Canaria en honor a Nuestra Señora del Pino, Patrona de la Diócesis de Canarias. Tiene lugar cada 8 de septiembre, aunque los actos conmemorativos se desarrollan a lo largo de todo el mes. La Fiesta del Pino transforma Teror en un centro de peregrinación constante, principalmente entre los días 7 y 8, en los que los peregrinos llegan caminando desde distintos lugares de la isla.
Oficina de Turismo de Teror: Calle Real de la Plaza, nº 6. 5330. Teror.
Teléfono: 928 613 808
Web: turismo.teror.es
Horario al público: Martes a sábados de 09:30h a 17:00h.
¿Dónde dormir?: Tu alojamiento en Teror.