Turismo de Gran Canaria celebró este viernes, 11 de noviembre, una reunión de la Mesa de Conectividad Aérea, presidida por el consejero del área y presidente de Turismo de Gran Canaria, Carlos Álamo. En la misma se abordaron cuestiones como los sistemas de alertas y previsiones ante situaciones meteorológicas extremas y se plantearon posibles mejoras para actualizar el protocolo de atención y respuesta a los pasajeros cuyos vuelos han sido demorados o cancelados, como sucedió durante el paso de la tormenta ‘Hermine’ los días 24, 25 y 26 de septiembre y que alteró la actividad en el Aeropuerto de Gran Canaria.

A la convocatoria de Turismo de Gran Canaria, promovida por una declaración institucional sobre incidencias aeroportuarias impulsada por el pleno insular del mes de septiembre, acudieron representantes insulares como Miguel Ángel Pérez del Pino, vicepresidente del Cabildo y consejero de Gobierno de Obras Públicas, Infraestructuras, Transporte y Movilidad, y Concepción Monzón, consejera de Arquitectura y Vivienda del Cabildo de Gran Canaria. También lo hicieron representantes empresariales como Santiago de Armas, de la Cámara de Comercio, o Pedro Ortega, de la Confederación Canaria de Empresarios. La reunión, con presencia del gerente de Turismo de Gran Canaria, Pablo Llinares, contó con la presencia de representantes de Aena, como Julio Peñalver Mora, director del Aeropuerto de Gran Canaria y Luis López Chapi, director de los aeropuertos de Canarias.

La Mesa, en respuesta a la citada declaración institucional del Cabildo de Gran canaria, acordó “actualizar el protocolo de actuaciones que ya existe para instrumentar una respuesta más eficaz ante situaciones de carácter extraordinario, de tal manera que podamos minimizar el impacto de las demoras y las cancelaciones y las incomodidades que estas generan en el cliente”, según apuntó Carlos Álamo.

El consejero de Turismo explicó que las decisiones que se tomaron ante la emergencia meteorológica de septiembre “una situación de carácter extraordinario, respondieron a criterios de seguridad que acabaron en retrasos y desvíos, como ocurrió en todos los aeropuertos de Canarias. Sin embargo, entendemos que sí podemos establecer un nuevo protocolo o actualizar el actual con un refuerzo en la atención a nuestros clientes mientras esperan a que se solucione el problema de conectividad y que esto sirva al mismo tiempo para mejorar la imagen del destino, así como la experiencia general de nuestros turistas en la Isla para que regresen”.