Gran Canaria tiene una gama de productos agrícolas, ganaderos y pesqueros, así como derivados de éstos (en una amplia y sabrosa extensión de elaboraciones tradicionales que incluyen mermeladas, mojos, panes, repostería tradicional —en Canarias, «dulces típicos»—, quesos, mieles y un largo etcétera) que tienen una cita semanal con el consumidor en los denominados mercadillos agrícolas, que distinguimos de los mercados municipales de abasto de apertura diaria. Casi todos los municipios de la isla ofrecen esta opción para adquirir un producto local que no siempre llega al comercio convencional.
Se trata, en cualquier caso, de una forma alternativa de adquirir dichos alimentos —en algunos casos, auténticas exquisiteces de producción exclusiva en cada comarca de la isla—, al tiempo que se tienen al alcance otras posibilidades complementarias de ocio y gastronomía que conviven en el entorno de estos espacios: restaurantes, cafeterías, tiendas de comestibles, museos, incluso actuaciones musicales.
Dos pueblos de la isla han tenido mercado dominical en el entorno de sus plazas, de modo continuado ante las respectivas iglesias de sus cascos históricos, desde hace tanto que sus orígenes son centenarios y se pierden en el tiempo. Con ese argumento, los ayuntamientos de Teror y Guía solicitaron en su día al Ministerio de Trabajo y Previsión Social del Gobierno la declaración de los domingos como «día feriado» (día en el que se permite la actividad comercial) en 1932 y 1935, respectivamente.
El Mercadillo de Teror, con sus puestos de venta ambulante en el entorno de la Basílica de Nuestra del Pino cada domingo de 9 a 15 horas, comparte con otros mercadillos agrícolas de la Isla la presencia de gran variedad de quesos y lo más fresco de los campos según la temporada. Pero lo más popular aquí son los chorizos y morcillas típicos canarios elaborados en carnicerías del pueblo; la gran variedad de panes que se hornean sólo para este día, entre ellos el pan de huevo —exclusivo de Teror—, pero también de papa, de millo, de batata y muchos más; los dulces de las monjas del Císter, repostería conventual de una orden de religiosas de clausura que tienen monasterio en el pueblo desde el siglo XIX; y la gran variedad de plantas aromáticas para infusiones y cocina que se nutren de la tradición yerbera de las Islas.
El Mercado Agrícola de Guía, que reemplaza a su pequeño y centenario mercadillo dominical frente a la iglesia y se traslada a la Rotonda de La Atalaya, abrió sus puertas en diciembre de 2021 en unas modernas instalaciones que reutilizan un antiguo estanque de agua para el riego de plataneras. Cuenta con parquin subterráneo, planta de Mercado con una treintena de puestos y cafetería (viernes a domingo 8 a 16 horas) y planta terraza de Gastromercado con locales de restauración (viernes y sábados de 11 de la mañana a 2 de la madrugada y domingos de 11 a 18). Todo ello dinamizado con actuaciones en vivo, conciertos, talleres y otras actividades.
Del conjunto de los otros mercadillos (muchos de ellos generalistas, pues incluyen, además de alimentación: ropa, calzado, marroquinería, decoración, etc.), los que destacan por su mayor especialización agrícola, ganadera y pesquera, además de su periodicidad, son:
El Mercado Agrícola y Artesano de Vega de San Mateo (viernes y sábados, mañana y tarde; domingos, sólo mañanas), es uno de los que cuentan con la mayor oferta en sus más de un centenar de puestos y, por ello, es de los más concurridos. Consta de dos naves, una para productos agroalimentarios, la otra para productos de artesanía. La miel del país, la repostería tradicional y los vinos de Gran Canaria forman parte de su amplio repertorio de posibilidades. Con una tradición que se remonta al siglo XIX, el actual mercado nació en 1980 como Mercadillo de Agricultores para responder a la demanda de los productores locales de un espacio donde vender de modo directo.
El Mercado Ecológico de Valleseco, Ecovalle (viernes por la tarde; sábados, mañana y tarde; domingos, sólo mañanas), es el primero de la isla especializado en frutas y hortalizas frescas con certificado ecológico; también cuenta con obrador-pastelería y puestos de otros productos envasados (mieles, vinos, pastas, etc.), todo ello de producción ecológica.
El Mercado Agrícola de Maspalomas, en la avenida de Tunte (de 8 a 14 horas en domingos alternos), cuenta con medio centenar de puestos con frutas, hortalizas, plantas, flores, quesos, panes y repostería. A tener en cuenta: las frutas tropicales, las aceitunas y los aceites de oliva virgen de la comarca.
El Mercado Agrícola y Artesanal de la Villa de Santa Brígida (viernes por la tarde; sábados, mañana y tarde; domingos, sólo mañanas), en un espacio recogido y acogedor muy cerca de la Casa Museo del Vino de Gran Canaria, incluye agricultura tradicional y ecológica, pan y bollería local, quesos, miel y vinos.