¿Quieres saber por qué en Gran Canaria hay tanta gente loca con el surf? La respuesta es sencilla. En Gran Canaria es muy fácil encontrar cerca de casa un buen lugar donde practicar surf y bodyboard. El buen clima durante todo el año y la enorme cantidad de playas que cubren la costa llaman a los niños a coger olas desde muy pequeños. Para los más jóvenes el bodyboard es una especie de deporte nacional en la isla.
Y si se trata de olas, en Gran Canaria tienes de todo tipo. Como por ejemplo, la derecha del Confital, en Las Palmas de Gran Canaria. Un atractivo más que suficiente para sorprender a los surfistas llegados de fuera de la isla. Aunque también puedes probar suerte en Arguineguín, en el sur o en el Lloret (La Cícer), en la capital. La costa norte de la isla también es refugio de surferos y de bugueros. Encontrarás buenas olas en el Puertillo de Arucas, otro de los spots clave.
¿Por qué es tan especial la ola en Gran Canaria? Los que saben cuentan que las olas de la Isla son poderosas porque las ondas llegan al litoral desde una gran profundidad.
La costa del archipiélago no cuenta con una plataforma continental y las olas rompen por ello con energía. Además, el suelo de la costa es en su mayoría volcánico, lo que favorece que no exista un gran movimiento de arena y la ola se fije siempre en un mismo punto, como ocurre por ejemplo en la archiconocida derecha del Confital.
Y es que en Gran Canaria es un pecado mortal no practicar el surf o el bodyboard. Hay demasiadas playas donde practicar. La isla tiene todas las condiciones para atraer a todos aquellos que buscan cruzar una buena ola. Además, aquí es posible coger olas sin necesidad de llevar neopreno de cuello a tobillo. ¿Te hacen falta más razones para saber por qué en Gran Canaria hay tanta gente loca por el surf?
